blogs de puericultura

Siempre he sido muy fan de Babyhome. Ya os he explicado en este blog que para mi primer hijo Jorge compré la hamaca onfour y la trona eat. Entonces no sabía nada de puericultura pero ya debía ser una señal de mi destino, porque de eso hace más de 5 años y la trona eat la seguimos teniendo impecable en la cocina. Es la trona que ha heredado Valentina y en la que desayuna, come y cena cada día. Mejor prueba que esa no hay. No obstante, había un producto de la marca que me gustaba mucho por sus colores creativos y su diseño original y que aún no había probado. Sí, debéis pensar que lo pruebo todo pero nada más lejos de la realidad, no había tenido el placer de conducir el cochecito Babyhome Emotion. Dice la marca que sus colores encandilan a grandes y pequeños y después de este test lo suscribo. Ya veréis en las fotos como se queda encandilada Valentina en su Emotion granate (precioso por cierto) y no sólo eso, mi madre (que no sale en las fotos) me dijo: ‘Hija, este cochecito si que me gusta, a mi no me vengas ahora con otro’. Así que doble enamoramiento. Os cuento mucho más aquí.

Es cierto que siempre me había parecido un cochecito ligero y bonito en cuanto a diseño por la combinación del color plata del aluminio y negro de sus acabados con la riqueza de sus colores saturados. Los hay para todos los gustos (hasta en amarillo y azul turquesa) y eso es bueno porque los colores también estimulan a los peques durante sus paseos.

¿Qué me ha gustado de este cochecito? Ayer mismo se lo explicaba y recomendaba a una lectora. Es facilísimo en todos los sentidos. Ligero de manejar, fácil de plegar, de abatir, de frenar. Subí con él al autobús y superó la prueba. Sus frenos lo mantienen sujeto en el vaivén del camino y además tanto la subida como la bajada se hace de manera ágil porque pesa realmente poco.

Me gustó su capota abierta con una ventana desde la que puedo observar a Valentina. También su amplia cesta inferior para guardar objetos (tiene capacidad de hasta 14 kgs.). Las ruedas (que son extraíbles y tienen amortiguación y freno trasero) giran muy bien, no se bloquean. El respaldo se reclina fácilmente y de manera suave sin que el bebé, que se ha quedado dormido, se asuste. Tiene reposapiés que puede abatirse o cerrarse (no todos los cochecitos lo tienen), el plegado es bastante compacto y se cierra en dos pasos. Tiene un dispositivo de seguridad y una vez plegado puede mantenerse de pie, cosa que me encanta porque así no se me ensucia ni en la calle ni en el suelo del parking, mientas abro el maletero del coche para guardarlo.

Lo cierto es que este cochecito está muy pensado para conducirse fácilmente con una sola mano. Lleva una correa de seguridad para que en los semáforos o pendientes lo ates a tu muñeca. Con adaptadores para grupo 0+ (y la preciosa silla Egg0+ de la misma marca que podéis comprar del mismo color a juego) sirve desde el nacimiento hasta los 36 meses.

Todos los modelos llevan de serie la capota de lluvia y la mosquitera que se coloca mediante una sencilla cremallera y que veo muy útil ya no solo para los mosquitos sino para cuando hay mucho viento.

El apoyabrazos que veis en las fotos es un accesorio opcional, muy útil desde mi experiencia. Fijaros como Valentina se coge todo el rato.

Al final la gordita se durmió la mar de a gusto

La sombrilla también es un opcional, aunque no suelo utilizarla mucho. Me gusta más la posibilidad de ampliar la capota con el Canopy Extender, otro opcional que la alarga y resulta ideal para proteger del sol al bebé. Tenéis también los sacos de paseo a juego y las bolsas de transporte para viajar con él en avión, por ejemplo este verano. A mi me gusta el posavasos que aunque es un accesorio muy yanki lo veo muy chic para mis paseos.

Desde luego es un producto super competitivo, no solo en precio, sino en diseño y calidad. Tenía que haberlo descubierto mucho antes. ¡Pero nunca es tarde! Después de todo lo que os he explicado ¿Os apetece que sorteemos uno entre las lectoras y lectores de este blog?