cambiador

Cuando estaba embarazada de Valentina no dormía por las noches. Todos me decían que al término del embarazo era lo más normal pero lo cierto es que yo soñaba con su habitación. Sí, sí, os parecerá tontería, pero este nesting del que ya os hablé en este blog me hacía pasar noches en vela: qué muebles necesitaba, qué textil, qué podría aprovechar de lo que ya tenía de Jorge. Cogía el Ipad y miraba remiraba en páginas web y blogs de decoración infantil. Si había algo que realmente me gustaba eran las habitaciones de Vertbaudet ¿Las habéis visto? Yo recibo periódicamente su catálogo de decoración infantil y alucino. Todos los detalles están a juego, desde las cortinas, los nórdicos, sacos para bebés, cambiadores, lámparas, vinilos infantiles… Tenía claro que algún día Valentina tendría una habitación de Vertbaudet y al final se la he regalado para su primer año. Me han ayudado en el proyecto María y Patricia, emprendedoras creadoras de Room Room Bebé (y aún no hemos terminado) ¿Queréis ver el resultado?

Cuando nació mi hija aproveché todo el textil que había guardado de su hermano. Era blanco y beige con estrellitas. Una habitación muy neutra y pura para bebés pero también muy sosa. Tampoco tenía muchos metros para hacer maravillas pero a veces no es necesario mucho espacio, sino mucha imaginación. En el catálogo de Vertbaudet vi la colección Ratoncitas. Tardé en decidirme porque también me gustaba la de mariposas o la nueva gama Bio. Siempre en tonos lilas, granates y rosas.

Estaba todo a juego: lámpara, alfombra, sofá pequeñito, cambiador, cuadros y vinilos, estanterías, baúles de almacenaje de juguetes, cortinas, protectores de cuna, nórdicos, sábanas y bajeras, sacos de bebés, cojines, hasta los pijamas. Todo me gustaba, todo lo quería.

Miré muchas noches Decopeques, mi blog de referencia en temas de decoración. Os lo recomiendo para sacar ideas. Le enseñé el catálogo de Vertbaudet a Jorge (que tiene 5 añitos) y al final ambos decidimos qué era lo que nos gustaba más para su hermana. Lo podéis ver en las fotos. Hemos optado no por llenar sino por decorar una habitación de ensueño en la que cada día me gusta entrar.

En estas estaba cuando en el evento Bloggers & Family me tocó moderar una mesa de emprendedoras y conocí a María y Patricia de Room Room Bebé. María me contó que su proyecto surgió en el momento en que fue madre de sus mellizos, Oihane y Hodei, de 18 meses. Ellos la inspiraron y le dieron fuerzas infinitas. Como mis hijos a mi.

Le pedí a María que es arquitecta e interiorista, y a su socia Patricia, que me ayudaran con la habitación de Valentina. Les impuse, eso sí todo lo que ya había escogido de Verbaudet, eso lo tenía clarísimo, pero ellas podían darme ideas de cómo colocarlo. Seguro que se les ocurría mil cosas más que a mi. De hecho, a eso se dedican en Room Room Bebé, a hacer de las habitaciones de nuestros bebés, espacios personales, cuidados, prácticos, funcionales y pensados, sobretodo para ellos.

Vinieron a casa, me asesoraron y me enviaron el proyecto. Aún no lo hemos acabado. Falta empapelar la pared pero lo haremos en enero. Entendieron a la perfección lo que yo quería y mi gusto por Verbaudet. Ellas analizan qué tendencias encajan es tu manera de vivir, de criar a tus hijos y de decorar el resto de la casa.

El resultado es el que veis en las fotos y en las láminas ¿Os gusta? Por cierto, si os apasiona Vertbaudet tanto como a mi, ahora tenéis un 50% de descuento en sus textiles para las camas y cunas de los peques.